Israel contra Hamás: la influencia de las redes sociales

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En los últimos meses han surgido diferentes análisis sobre la triangulación entre la guerra, la cobertura de medios de comunicacion y el papel de las redes y plataformas sociales. Con la guerra en Ucrania la polarización, el marketing político y la desinformación estuvieron en muchas de estos análisis. Ahora con la guerra entre Israel y Hamás aún cuestionamos más cómo las parte en conflicto están influenciando la opinión pública a través de diferentes estragegias y cómo estas se impregnan en los medios.

El director ejecutivo de una empresa israelí de seguimiento de redes sociales le dijo a Joseph Gedeon de POLITICO que el conflicto ha generado de tres a cuatro veces más desinformación en línea que cualquier otro evento que haya enfrentado su empresa. Y en medio de un conflicto geopolítico como el que estamos viviendo, aviva las llamas. No solo es una amenaza para los medios de comunicación sino para los ciudadanos y su toma de decisiones en procesos vinculados a la salud democrática. A nivel diplomático, los gobiernos se convierten en el principal objetivo de la guerra de información en línea entre Israel y Hamas.

En primer término, la desinformación es una estrategia más de la guerra. Forma parte de las acciones bélicas de los dos bandos y es una forma más de intentar controlar el relato para vencer también en los medios de comunicación y las redes sociales.

La guerra y el declive de las redes sociales

Por otra parte, ya abordamos si estábamos viviendo el fin de las redes sociales, tal y como comentamos en el anterior boletín. Lo cierto es que las principales plataformas en línea “están rompiendo con las noticias», afirma Charlie Warzel en The Atlantic.

Investigación a X

Vemos que hay ciertas plataformas como X que se han vuelto más inestable, de la misma forma que, el tráfico a los principales sitios de noticias globales desde Facebook de Meta y X han disminuido drásticamente. Durante el reciente conflicto entre Israel y Hamás, la red social X, propiedad de Elon Musk, fue inundada con videos falsos, fotos y contenido engañoso. La Comisión Europea abrió una investigación formal a X tras la entrada en vigor de la Ley de Servicios Digitales.

Dependientes

Las referencias a sitios de noticias de Facebook y X, anteriormente Twitter, colapsaron durante el último año. Las plataformas sociales han dejado de esforzarse en difundir información de alta calidad de medios de noticias acreditados, lo que ha provocado una avalancha de información errónea en sus redes y ha obligado a algunos medios de comunicación a luchar por un nuevo modelo de negocio. Pero, en Axios escribe Sara Fischer, esto podría ayudar a los medios de comunicación a volverse menos dependientes de plataformas externas y centrarse en crear sus propios productos.

Redes de guerra

La influencia y el poder de los medios en las redes sociales decrece al mismo tiempo que dichas plataformas han vuelto a ser el medio a través del cual el mundo es testigo de la violencia y crueldad en una zona de guerra activa. Específicamente, el reciente conflicto entre Israel y la Franja de Gaza ha sido ampliamente difundido en plataformas como TikTok e Instagram. Estas escenas, aunque familiares, no dejan de ser impactantes. Históricamente, la guerra ha sido retratada a través de diferentes medios, desde la influencia de CNN en la Guerra del Golfo hasta la reciente denominación de la invasión de Rusia a Ucrania como la «primera guerra de TikTok».

La inestabilidad de las plataformas sociales, el incremento de los discursos de odio y la insuficiencia de los recursos de moderación parece que son factores determinantes en la difusión de vídeos violentos y desinformación generalizada. Las principales plataformas sociales han mostrado signos de declive en el último año. Muchos usuarios han migrado a competidores más pequeños o han abandonado completamente estas redes.

Principales canales

A pesar de la proliferación de contenido engañoso, ambas partes en conflicto han utilizado las redes sociales para la guerra de información. Mientras Israel denunciaba a Hamas comparándolo con ISIS, Hamas utilizaba Telegram para difundir su contenido, incluidos videos promocionales y grabaciones del conflicto. La desinformación y la propaganda en línea han intensificado las tensiones, con expertos advirtiendo sobre el impacto potencial en la percepción internacional del conflicto.

TikTok y su influencia

TikTok ha sido objeto de críticas y acusaciones en relación con su influencia en la percepción del conflicto Israel-Gaza. Drew Harwell and Taylor Lorenz escriben The Washington Post sobre cómo la guerra «ha colocado a TikTok en el centro de una discusión acalorada sobre los riesgos y el poder de la aplicación de redes sociales dominante a nivel mundial»

Visión polarizada

Por un lado, críticos argumentan que la popularidad de videos pro-palestinos en la aplicación es evidencia de que debería prohibirse en los Estados Unidos. Sin embargo, creadores de contenido y expertos en redes sociales argumentan que la situación es más compleja debido a la naturaleza diversa de la plataforma, que cuenta con más de mil millones de usuarios en todo el mundo. Se destaca que los datos muestran una variedad de opiniones y que no existe una regla clara sobre el equilibrio del debate ideológico en las redes sociales.

+ Este artículo forma parte de la newsletter, número 58 de #ComunicaciónQueImporta.

Las mentiras aún son muy humanas

Durante el conflicto entre Israel y Hamas, la inteligencia artificial generativa no ha sido un factor importante en la inundación de desinformación en las redes sociales. En su lugar, la amenaza dominante ha sido el uso de imágenes reales fuera de contexto. La mayoría de las imágenes y videos que los verificadores de hechos han desmentido durante la guerra han incluido imágenes de otros países como Siria o Turquía, y del pasado, como un video que en realidad era de un conflicto anterior en Gaza. Aunque ha habido escrutinio en torno al contenido dañino que los generadores de imágenes de IA pueden crear, las restricciones en imágenes gráficas o violentas pueden haber frenado la producción de imágenes y videos relacionados con la guerra.