Fotorreporteros de guerra (1): Roger Fenton y Timothy O’Sullivan
Editor’s Choice #7
Cuando la cámara se convierte en una herramienta crítica que nos ayuda a entender los estragos producidos por una guerra es cuando el trabajo de un fotorreportero consigue el objetivo.
¿Que mueve a un hombre a meterse en un conflicto bélico sin ser parte de ningún bando? ¿Porqué arriesgan la vida cada año tantos fotógrafos? ¿Es el prestigio de conseguir la foto que se verá reproducida en todos los medios de comunicación y que quedará en la retina cuando se hable de esa guerra en cuestión?
Roger Fenton
Para compensar la aversión de la población inglesa a una guerra que quedaba muy lejos de casa, Roger Fenton fue enviado al frente con la idea de realizar fotografías que levantaran la moral de los familiares de los combatientes sin mostrar muertos ni escenas comprometidas para el ejercito británico. La guerra de Crimea, en el sur de la Rusia de los Romanov, enfrentó a Gran Bretaña, Francia y el Imperio Otomano por un bando y Rusia por el otro a orillas del mar Negro. Se desarrolló de 1853 a 1856. Las máquinas de fotografiar todavía eran artilugios muy rudimentarios y pesados y la utilización del colodión húmedo obligaba a los fotografiados a permanecer durante mucho rato inmóviles. Hay que decir que la primera fotografia fecha de 1839 y no fue hasta la década de 1850 que se mejoraron los aspectos técnicos de revelado y positivado.
Timothy O’Sullivan
Una corta pero intensa vida (murió a los 42 años) la de este fotógrafo norteamericano que hizo la famosa foto por la que se le recuerda: ‘La cosecha de la muerte’. El campo de batalla de Gettysburg después del enfrentamiento de tropas de la Unión y Confederadas. Aunque también estuvo presente en el asedio de Petersburg o la segunda batalla de Fort Fisher o hasta en la rendición del general sureño Robert E. Lee, a Timothy O’Sullivan siempre se le asociará a Gettysburg.