Eva Domínguez: «El periodismo en la era digital no para de cambiar»
Periodista digital, profesora y consultora. Como emprendedora, la Google Digital News Initiative Innovation Fund ha financiado su idea: NewsKid, un proyecto de periodismo para niños.
Eva Domínguez es periodista de profesión. Empezó en el Diari de Barcelona y en El Periódico de Catalunya. Su curiosidad por las nuevas tecnologías e Internet la llevaron al Máster Interactive Telecommunications Program de la NYU. Domínguez da clases de periodismo digital y narrativa interactiva en el grado de periodismo de la UPF, el postgrado en Comunicación Estratégica Digital de la UPF, el postgrado de Periodismo Digital Clarín-UPF y en el curso de Noves narratives: documental interactiu i transmèdia de la DocsBarcelona Documentary School. Google está financiando una idea con la que lleva trabajando tiempo: NewsKid, un proyecto de periodismo para niños.
¿Cómo se transforma un periodista en papel en un periodista que investiga y experimenta en el ámbito digital?
Con curiosidad y con ganas de experimentar y aprender lenguajes, herramientas y soluciones de otros ámbitos. Es clave tener claro que estamos en transformación constante. El periodismo en la era digital no para de cambiar y tienes que ir probando e inventando. Estamos en permanente transformación.
«Nos hemos dejado llevar por esa presión de la inmediatez y estamos viendo que la audiencia también valora el periodismo de más calidad«
¿La brecha digital también afecta al ámbito del periodismo?
Sí, por supuesto. Pasa en todos los sectores y todas las profesiones, que lo nuevo da un poco de miedo porque te sientes más seguro en aquello que ya conoces. Adentrarse en lugares más pantanosos y que las reglas van cambiando, hay un miedo y una resistencia lógica. También es verdad que esto está cambiando porque se entiende que el ámbito digital forma parte de nuestras vidas y vivimos en una sociedad digital y no tiene mucho sentido resistirse a ello. Lo que hay que hacer es aprender constantemente. Cuando hice el Máster en Nueva York me tocó aprender programación, telecomunicaciones y otros aspectos. Me metí a fondo porque me parecía un estímulo extraordinario. A mí me gustaba la tecnología y quería aprender tecnología. Cada periodista debe encontrar su fórmula, su camino y hasta dónde quiere llegar.
¿De qué forma crees que las nuevas tecnologías están ayudando al nuevo periodismo digital?
Cambian las reglas de juego. Hace tiempo que van cambiando. En cada momento nos enfrentamos ante nuevos retos. Ahora el reto es competir con las fake news, con los creadores de información falsa, con los riesgos de informar rápidamente y no verificar,… todo esto forma parte de las dificultades de ejercer el periodismo. También se está viviendo un movimiento de volver a las bases. Nos hemos dejado llevar por esa presión de la inmediatez y estamos viendo que la audiencia también valora el periodismo de más calidad. Está ocurriendo y es positivo. Por tanto, podríamos hablar de muchos aspectos.
¿Y en cuanto a formatos?
Cambian las formas de contar historias. Los formatos son más audiovisuales. Y conviven formatos micro con formatos más largos. Por esto, hay multiplicidad de fórmulas para ejercer el periodismo.
Y este contexto, hay unos actores principales que son las empresas tecnológicas. ¿Están condicionando en exceso el papel de los medios de comunicación?
Las plataformas tecnológicas lo que hacen es definir el canal de comunicación. Antes que surgieran, los canales eran otros y los medios lo tenían muy controlado. Ahora, ¿qué ocurre? Pues que estas empresas establecen canales iguales tanto para medios de comunicación como para ciudadanos. Los medios tienen que adaptarse a las nuevas reglas de la difusión digital.
Y seguramente lo que aporta para los ciudadanos, es la posibilidad de experimentar en estas plataformas sociales…
El periodismo es una actividad narrativa sobre la actualidad que tiene unos procesos de validación de los hechos a contar. Ahora hay que hacer subrayar mucho más que hay unos procesos periodísticos. A veces cuando sólo hablamos de formatos, la audiencia no ve lo que hay detrás. Se puede confundir una noticia falsa con una información verificada.
En este mundo de formatos compartidos, los géneros ya no pertenecen a un ámbito sino que sirven para cualquier mensaje comunicativo y el periodismo también debe apropiarse de diferentes formatos. Formatos que funcionan como newsgames o webdocs, que son lenguajes muy actuales que las nuevas audiencias conocen y disfrutan.
¿Y podemos encontrar rentabilidad económica en el uso de estos nuevos formatos?
Creo que no hay que buscar la rentabilidad económica de un formato concreto. Si hiciéramos eso, te diría que me dijeras la rentabilidad económica de determinados artículos de determinadas secciones en un periódico. No podemos ir a buscar la rentabilidad de un formato. El periodismo es un servicio y un formato forma parte de una estrategia de una empresa que decide ofrecer ese servicio a través de diferentes canales y lenguajes. Buscar la viabilidad de un formato concreto lo veo complicado.
«El periodismo es un servicio y un formato forma parte de una estrategia de una empresa que decide ofrecer ese servicio a través de diferentes canales y lenguajes«
Quizás hablamos demasiado de modelos de negocio y poco de formatos…
Hace muchos años cuando hacía interactivos me decían que la sección de Última Hora tenía muchas más visitas. Yo respondía que sí, pero que ellos tenían toda un equipo de gente para hacer contenidos específicos. Un formato interactivo de fondo tiene rentabilidad a largo plazo. Me estás pidiendo rentabilidad a corto plazo pero hay trabajos periodísticos que tres años más tarde aún tenía un número de visitas diario. Es muy peligroso hablar de rentabilidad asociada a un formato en concreto.
Otra cosa es que debas buscar las vías para financiar los contenidos. No podemos desvincularnos de esta necesidad, evidentemente. Ahí me encuentro para buscar rentabilidad en proyectos concretos. Pero la rentabilidad se tiene que pensar como un global no como una suma de formatos que cada uno tiene que ser rentable por sí solo.
Completamente de acuerdo, lo que pasa es que al final quizás vivimos demasiado obsesionados en el retorno inmediato en un contexto en el que estamos obsesionados por los clics, las páginas vistas y los usuarios únicos.
Sí, lo que pasa es que hay que empezar a medir otras cosas. El retorno en la inversión directa y también la no directa: la proyección de marca, la credibilidad de marca,… todo esto, ¿cómo lo cuantificas? Hay otros aspectos que no son tan fáciles de medir pero que están fuera de la conversación y de los argumentos.
Hablabas de proyectos personales. ¿Cómo surgió el proyecto de NewsKid?
Te hablaba del Máster que hice en Estados Unidos, de 1997 a 1999. Ahí empecé a diseñar el primer prototipo. La semilla se plantó hace muchos años. Quería hacer un medio periodístico para niños. Es una forma de explicar la actualidad más difícil, las hard news, a los niños. Forma y contenido sea para el crío una experiencia lúdica y sin darse cuenta supiera lo que sucede en el mundo. Eso lo hice en formato web. Quise aplicarlo en formato diario y con la burbuja tecnológica del 2000 fue complicado. Los medios en aquél momento era escépticos respecto a la web. El mercado tampoco estaba preparado y el consumo digital aún era muy menor.
Pero después de unos años, vi que era una idea que debía recuperar porque ahora sí que era el momento. Vivimos en una sociedad digital, el consumo digital es enorme y las nuevas generaciones consumen muchos medios. Entonces me puse a actualizar la idea. Tenía claro que tenía que ser un proyecto transmedia y que combinara plataformas tradicionales con plataformas emergentes como la realidad aumentada, la realidad virtual o lo que pueda venir. Lo repensé, como una historia de aventuras, con un personaje de ficción para poder serializar el servicio. En esto estamos.
El personaje es un extraterrestre. Debe ser difícil que un extraterrestre pueda llegar a entender la victoria de Trump o el Brexit.
Es una mirada muy interesante para entender lo que hacemos los humanos y sí, hay cosas difíciles de explicar. La verdad es que el personaje da mucho juego y hemos definido su cultura, su narrativa, cómo es, por qué está aquí y por qué pide ayuda a los niños. Va teniendo aventuras en las que va descubriendo cosas de los humanos. Cada aventura acaba con la investigación de un tema de actualidad.
En este sentido, ¿el proyecto demuestra que quizás queremos realizar periodismo generalista y al final, lo que tenemos que hacer son proyectos periodísticos de nicho?
Creo que hay sitio para todo. De hecho, NewsKid, por temas, sería un medio generalista porque hay temas muy globales. Pero en definitiva, hay espacio para todo tipo de proyectos. Todo es buscar el tono, la identidad, su forma de conectar con parte de la audiencia.
Subrayas la reactualización del proyecto introduciendo la realidad virtual o la realidad aumentada. ¿Qué aportan este tipo de herramientas?
Son experiencias distintas. Lo que hacemos es que hay un mundo narrativo y cada plataforma desarrolla una parte de la narrativa distinta con una experiencia de usuario distinta. Lo que se puede experimentar con cada tecnología es distinta a la otra. No son los mismos contenidos, sino que como decía, hay una voluntad transmedia, para ver qué aporta cada plataforma a nuestro objetivo global.
¿Y en qué fase está el proyecto?
Estamos puliendo los últimos retoques de la aplicación, que son las funcionalidades más específicas de ecommerce, para poder comercializar el proyecto. Estamos haciendo un piloto para las escuelas y ya estamos produciendo contenidos como si fueran números cero. La idea es salir en setiembre.
<p><em><a href="http://nextmedia.lavinia.tc/medios-de-comunicacion/eva-dominguez-el-periodismo-en-la-era-digital-no-para-de-cambiar/" rel="canonical" data-external="true">El artículo fue publicado por primera vez en Next Media</a></em></p>