¿Qué podemos aprender con el accidente mortal de Kobe Bryant y de su hija Gigi?
El fallecimiento del ex jugador de la NBA, Kobe Bryant, y de su hija Gigi, abre algunas cuestiones que nos deben hacer reflexionar sobre el papel de los medios de comunicación en situaciones de crisis, atentados o accidentes, así como de los protocolos de actuación de las instituciones en los momentos complejos. Propongo un debate en cinco líneas:
1. La necesidad de encontrar el balance entre el derecho a la información y el derecho a la privacidad. Los funcionarios públicos encargados de hacer cumplir la ley en Los Ángeles criticaron al medio de comunicación de celebridades TMZ por ser el primero en informar sobre el accidente del helicóptero que mató a Kobe Bryant y a su hija de 13 años este domingo, antes de que la policía pudiera notificar a su familia sobre la tragedia. El alguacil del condado de Los Ángeles, Alex Villanueva, calificó la práctica de «extremadamente irrespetuosa» y «totalmente inapropiada».
2. Confirmación por doble o triple vía. TMZ, medio especializado en muertes de famosos. Es conocido por publicar escándalos de celebridades y chismorreos pero el sitio web TMZ se ha forjado también otro nicho: ser el primero en dar la noticia de muertes de famosos, a cualquier precio. El sitio web, fundado en 2005, tiene un historial de ser el más rápido cuando de muertes de celebridades se trata: Michael Jackson, Whitney Houston o Prince, por ejemplo. Algunos analistas dicen que esto es producto de su extensa red de fuentes en California. Entre estas fuentes, empleados de aeropuertos, choferes de limusinas, funcionarios judiciales, policías y funcionarios de Justicia. El debate es si puede funcionar entonces com fuente fiable. En verdad, parece que sí pero siempre cuando sea parte de una cadena de confirmaciones más amplia. No vale sólo usar el paraguas «Según el portal de famosos TMZ…».
3. Todas las vidas importan. Una vez se conoció la noticia de la muerte de Kobe, sucedieron diferentes informaciones no contrastadas por los medios que afectaban al resto de la familia del ex baloncestista. Algunos medios informaron que en el vuelo iban las cuatro hijas, después se incluyeron otras personas, y se volvió a informar, en otro sentido. Las especulaciones volaron a nivel global y fueron tremendas. Todas las vidas importan y la constrastación debe aplicarse no solo con la noticia principal sino con los hechos en su totalidad. El resto de vidas, ya sean de la familia de Bryant o no, importan. Las otras personas que también fallecieron, además de Kobe y su hija Gigi, importan.
4.La programación de mensajes en redes sociales puede ser peligrosa. Es interesante encontrar los mecanismos necesarios para publicar en redes sociales. Social Bakers o Hootsuite nos pueden permitir gestionar nuestros canales sociales de una forma clara y efectiva. No obstante, hay que ir con cuidado. Unas horas antes, LeBron James había superado a Bryant como tercer máximo anotador de la NBA, las noticias sobre este hecho habían quedado publicadas y, en algunos casos, programadas en los perfiles sociales de medios de comunicación. Por ejemplo, en The Guardian. Minutos después del anuncio de la muerte del jugador de Los Angeles Lakers, el periódico británico publicó este récord de forma programada ante el estupor de los usuarios. La noticia no era un récord sino un accidente mortal.
5.Tener claro un protocolo de crisis. El despliegue informativo de las instituciones es algo muy complejo y nada fácil. No obstante, debe poder facilitarse este trabajo a través de una reflexión previa y protocolo de actuación claro en caso de muertes, accidentes o incidentes en organizaciones e instituciones. En ese caso, sorprende la tardanza de la liga profesional de baloncesto, NBA, en hacer el comunicado oficial de su comisionado, Adam Silver.
Por otro lado, aún sorprende más el perfil bajo del propio equipo de Bryant, Los Angeles Lakers, que se ha limitado a publicar un breve comunicado en el que anuncia que el próximo partido contra los Clippers queda suspendido y que se suman a las condolencias por la muerte de su leyenda: «Es un momento difícil para nosotros, seguiremos dando apoyo a la familia Bryant y compartiendo información tan pronto como sea posible».
Los Lakers, en total estado de shock. Me pregunto si este tipo de comunicación está acorde a la figura global de Bryant. Primar la familia y la persona por encima del mito. Un buen debate.
Hola. Correctísimo e inteligente análisis que responde a muchas preguntas que periodistas y casi todo el mundo nos hacíamos al tiempo que íbamos conociendo reacciones e informaciones de diversa procedencia. Tan sólo una puntuación: las demás vidas no sólo importan, lo hacen de igual manera y nos estremecen más cuanto más jóvenes eran. Lo que nadie explica al lector español es el contexto: si el vuelo era necesario, de riesgo normal, habitual en esa ciudad para desplazarse para llegar al entrenamiento de tu hijo, etc.
Gracias por tu blog.
Muchas gracias por tu comentario, Carmen. Efectivamente, el contexto importa.
Buen análisis.