Ali Lmrabet: «Soy víctima de una terrible arbitrariedad»
El periodista marroquí Ali Lmrabet está en huelga de hambre desde el pasado 24 de junio. Las autoridades de Tetuán, su ciudad natal, le niegan un certificado de residencia con el que poder renovar el documento de identidad y el pasaporte. La denegación de estos documentos impide a Lmrabet relanzar desde Marruecos su semanario satírico Demain online, justo ahora que ha expirado la prohibición que le impuso un tribunal marroquí de ejercer el periodismo en Marruecos durante diez años (2005-2015). Lmrabet ha comenzado su huelga de hambre en Ginebra (Suiza) por ser la sede de la ONU. Distintas organizaciones se han dirigido al monarca para que dé la orden a las autoridades del reino alaui y renueven el pasaporte y el DNI del galardonado reportero, paso imprescindible para que pueda volver a publicar sus revistas.
Alí, gracias por atendernos. Primero de todo, ¿cómo te encuentras?
Extremadamente cansado pero bien. Por el momento en todo caso.
¿Por qué una huelga de hambre?
Una huelga de hambre es una acción radical para defenderse, o intentar hacerlo, frente a una situación extraordinaria. En este caso la negativa de un Estado entregarme mi DNI y mi pasaporte, es decir de mi identidad, solamente para impedirme ejercer libremente mi profesión de periodista. Algunos siguen diciendo que Marruecos ha cambiado.
También te manifiestas delante de Naciones Unidas en Ginebra. ¿Has tenido algún tipo de contacto con ellos? ¿Han colaborado para ayudarte?
Por el momento muy poco. La ONU sirve más al Estado que al individuo. Es también por eso que estoy aquí, para recordar a las Naciones Unidas y a la Alta Comisaria de derechos humanos que el individuo también existe.
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¿Crees que el Gobierno español puede interceder a favor de tu causa?
No lo creo. Cuando hace una semana un grupo de diputados de diferentes partidos del Congreso presento una resolución no de ley de apoyo recordando la que se aprobó por unanimidad después del ataque terrorista contra el semanario Charlie Hebdo, el grupo parlamentario del PP se negó a votarla. Eso, la libertad de expresión es buena para los Occidentales, no para los moros.
Más allá de las organizaciones, lo cierto es que vas sumando apoyos internacionales a través de gente reconocida, intelectuales y gente de la cultura. ¿Cómo podemos ayudarte los ciudadanos?
Ante todo estar convencidos, después de leer mi dossier en mi web www.demainonline.com, de que soy realmente víctima de una terrible arbitrariedad. Y si estas o estáis convencidos pues apoyadme con lo que sea, es decir difundiendo esta información.
¿Cómo se puede ejercer el periodismo en Marruecos?
Pues cantando los supuestos logros del régimen, no criticar a los poderosos y aplaudir a todo lo que emprende el gobierno. Sino, pues te encuentras en mi situación.
¿Publicaciones como Demain Magazine o Duman pueden compararse a Charlie Hebdo?
No. Nosotros apoyamos el derecho de Charlie Hebdo a publicar lo que le de la gana. En Francia el derecho al blasfemio existe. En Marruecos es diferente. No publicamos algo que pueda ofender a cristianos, musulmanes o judios. Pero es una elecion nuestra. Prefiero ofender al tirano, al dictador, al extremista religioso que a un creyente o a una victima.
«Prefiero ofender al tirano, al dictador, al extremista religioso que a un creyente o a una victima»
Desde el punto de vista político, Marruecos actúa como gendarme de las potencias occidentales ante las amenazas de Al-Qaeda o Estado Islámico?
¿Quiere usted decir mercenario de Occidente? Mi país es el carcelero de Estados Unidos cuando se trata de torturar a yihadistas o simples sospechosos. No lo digo yo, lo afirma un reciente, y terrible informe del Congreso de los Estados Unidos sobre la tortura. Pero es por eso que Occidente mira hacia otro lado cuando nuestro régimen nos aplasta.
Si consigues solucionar el problema de tu pasaporte, ¿quedarán ánimos para ejercer periodismo satírico en tu país? ¿Vale la pena tanto esfuerzo por esta causa?
Si y si. Uno es lo que es.