Mark Thompson y el periodismo del New York Times
El presidente del New York Times, Mark Thompson, medio colapsa la profesión en Twitter con un titular: «La gente pagará por las noticias». Aplausos, botellas de cava abriéndose en la AEDE y vítores generales. Pero si nos quedamos en el titular seguramente pereceremos y nos quedaremos en una falsa imagen. Quizás la cuestión no sea si los usuarios deben pagar por los contenidos sino por qué contenidos deben pagar. ¿Deben volver los muros de pago? La entrevista de Thompson en El Mundo es toda una declaración de intenciones y de estrategia global. No hay fórmulas secretas, ni Trump que salve a los periódicos por mucho que se repita.
La cuestión no sea si los usuarios deben pagar por los contenidos sino por qué contenidos deben pagar
Interpretar constitucionalmente lo que hace en New York Times como solución global sería un error. Y ya ha sido un error en el pasado. Fórmulas diferentes para modelos diferentes. Eso es lo que funciona. Eso sí, hablamos demasiado de modelos de negocio y de poco periodismo. Aquí algunos consideraciones de Thompson más allá si la gente debe pagar o no. Atención a navegantes, palabra clave: periodismo de calidad.
«El smartphone es la plataforma más importante, con diferencia. Tableta y PC, maduras, ya están en caída»
«Hay presión sobre las comunicaciones públicas en toda Europa con un fuerte lobby contra cadenas como BBC»
«En un momento en el que las grandes plataformas se quedan con un trozo tan grande de la tarta publicitaria, el riesgo de basar la estrategia en el número de usuarios únicos es grande… Repartir periódicos gratis no es buen negocio. Los panfletos nunca financiaron buen periodismo»
«Me preocupa mucho más que líderes políticos, como el presidente de EEUU, refrenden aseveraciones supuestamente periodísticas presentadas sin pruebas o directamente falsas»
«La manera más saludable de financiar el periodismo es buscar consumidores que lo paguen. Nosotros pensamos que producimos algo de calidad por lo que habría que pagar»
«Lo que nos distingue de otros periódicos es que hemos adoptado una posición de producir algo de valor por lo que la gente esté dispuesta a pagar. Por eso hay que tener mucho cuidado con la reducción de costes, para no socavar el valor del producto. Nuestra sala de redacción tiene casi el mismo número de personas que hace 10 o 20 años, si bien muchos están destinados a tareas distintas. Contamos con 1.400»
«Cuando sucede algo importante, quitamos el pago: el nuestro es muy distinto del de The Wall Street Journal o Financial Times, más estrictos y herméticos. Acostumbramos a la gente al buen periodismo, lo que contribuye al modelo de pago»
No creo en ese modelo de pago por contenidos, por más calidad que tenga el trabajo periodístico. La solución no es pasar de cobrar por el papel, al cobro en digital. Los medios deben buscar diferentes modelos y estrategias de negocio, distintos a lA publicidad y el cobro al lector, ese es el reto de esta nueva época.
Gracias por el comentario, David. Yo tampoco estoy muy convencido de este modelo de pago por contenidos. De hecho, en el artículo comento que no es un recurso universal. Estamos ante muchas posibilidades y cada medio debe buscar la mejor.